domingo, 26 de octubre de 2014

Halloween

Empieza Octubre y todo en USA de inunda de calabazas, fantasmas, esqueletos, arañas, disfraces.
La gente empieza a disfrazarse para ir al Club o al bar. No les importa nada, se ponen lo más ridículo que encuentra (o lo más en bolas que pueden) y salen..
 
Es nuestro deber como buenas au pairs conseguir un disfraz en el caso de que nos toque hacer Trick or Treating con los niños. Hay disfraces por todos lados, pero no es fácil conseguir uno apropiado.
Yo fui a Party City y los disfraces no son para nada proporcionales.. Super grandes (como si todas tuviéramos globos en lugar de pechos), súper cortos...  Algo corto quizás eligiría si estaría en Argentina, no voy a hacerme la María Teresa de Calcuta, pero no para usar acá con la HF haciendo T or T. 
Las nenas querían que me disfrace de la bella durmiente o cenicienta pero no voy a gastar alrededor de 50 USD por algo que no me gusta o hacer de pelotuda tampoco jaja.
En Amazon también se pueden conseguir cosas baratas y muy buenas pero como los talles acá en USA son bastante raros no me animé. Suelen aclarar todas las medidas pero no me llevo muy bien con los "inches".
 
Si solo se necesitan disfraces para salir con amigas es mucho más fácil. Es ponernos los que se nos da la gana y listo.
 
Siempre armar nuestro propio disfraz es mucho más fácil. Les dejo algunos que encontré por ahí. No sé si están muy buenos, pero son baratos, originales y a veces lo ridículo es divertido.
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

jueves, 23 de octubre de 2014

Segundo mes

El 15 de Octubre se cumplieron dos meses desde que estoy acá, viviendo en Boxborough. En general se pasó volando, aunque hay días que son eternos. Me di cuenta que la ciclotimia es parte de esta experiencia. Siempre va a haber altos y bajos. Días buenos y otros no tantos. Por momentos creo que voy a enloquecer viviendo en un lugar tranquilo y extraño Buenos Aires, y por otros vivir acá me da algo de paz (cuando no hay gritos y llanos de las nenas, claramente).
 
En lo personal, creo que estar viviendo acá "sola" me está ayudando a crecer mucho, a madurar más precisamente.
¿Lo volvería a hacer? sin dudas. ¿Volvería a elegir un suburbio? no lo creo. Aunque me de paz, disfruto de estar sola, ¡soy muy inquieta! Esto de tener todo a 15 minutos, 30 minutos, 1 hora, tener que depender de un auto para ir a TODOS lados... no es lo mío. Me encantaría vivir en el centro de Boston. Probablemente allí no tendría una casa tan grande y linda, una pileta, rodeada de tanta naturaleza, se complicaría más moverme con auto... pero bueno, nunca morí por tomarme subte y Boston es precioso.

El fin de semana largo me fui a pasarlo a Boston con otra au pair argentina que vive cerca del centro. Hablar con otra argentina y salir de fiesta era lo que necesitaba. Fuimos a The Tavern in the Square el viernes, genial ese lugar y el sábado fuimos a un Club que tenía pista con música latina, mejor todavía.
El domingo me fui a pasar la noche a Boston College con una amiga de Argentina que vive ahí, también fuimos a un barcito cerca de la universidad.
Un fin de semana movido y bien divertido. De vez en cuando se necesita algo así cuando se está tan lejos.

Por otro lado está por llegar el invierno y ahí sí que me voy a morir o solo hibernar para no ser tan dramática. Voy a hacer la gran tortuga y dormir hasta que llegue la primavera.
 
Por otro lado, está llegando Halloween y ya se empiezan a ver varias casas decoradas. Las tiendas de disfraces repletas y calabazas everywhere! Vas a Starbucks, café de calabaza; vas a un bar o boliche, cerveza de calabaza; Heladería, helado de calabaza; Oreo de calabaza, Cupcakes de calabaza... calabaza, calabaza, calabaza.
 
Acá decoramos el fin de semana la entrada y nos queda por cortar las famosas calabazas pero eso se deja para los últimos días...

lunes, 13 de octubre de 2014

VIVIR EN EL EXTRANJERO

Texto realizado por un argentino.
 
"Somos muchos los que por diferentes motivos un día decidimos dejar nuestra casa, familia, amigos y amores para irnos a otra tierra a empezar de nuevo.
Sin ventajas, sin enchufes (acomodo), sin apoyo, sólo con la maleta llena de trapos inadecuados para el nuevo clima, ilusiones y un título enrolladito (que sigue enrolladito y sin homologar).
Un bolsi...
llo lleno de nuestros ahorros (en mi caso nada gracias al corralito), y por si acaso, con las groserías bien aprendidas en todos los idiomas posibles, para por lo menos saber cuándo nos están insultando.
Muchos quisimos tirar la toalla más de una vez y mandar a donde se merecía al ignorante de turno que nos discriminaba, tomarnos el primer avión cuando no teníamos cerca a nadie que nos hiciera un caldo de pollo para pasar la gripe. Muchos gastamos todo lo que nos sobraba del sueldo en tarjetas, cibercafés, estampillas, y cuanto medio nos permitiera seguir en contacto con los que se quedaron en casa o con los otros que estaban desparramados por el mundo.
Muchos tuvimos que auto-cantarnos el feliz cumpleaños, cenar solos en Navidad, trabajar en Año Nuevo para que el trago fuera menos amargo. Muchos nos perdimos los momentos importantes en la vida de nuestros seres queridos, no sólo la cotidianidad, sino esos momentos memorables. Somos los eternos ausentes en las bodas, nacimientos, cumpleaños de quince, graduaciones, incluso de los funerales, principalmente los funerales.
Nos hemos convertido en facebook-twitter-skype-whatsapp- dependientes, y eso después de haber superado la era de la icq-messenger-postalelectrónica-fax-dependencia.
Hemos hecho nuevos amigos, formado una familia o hemos sido adoptados por la de otros. Nos hemos acostumbrado al frío o al calor, a que por estos lugares nadie hace cola para usar el transporte público, a caminar por la calle sin aferrar la cartera o bolso por miedo a los robos, a usar los hospitales públicos, a no dejar la luz encendida, a abrir las ventanas antes que encender el aire acondicionado, a dejar las frutas tropicales para los momentos especiales y atiborrarnos de fresas grandotas que antes sólo comíamos en el verano. Hemos aprendido a cruzar la calle por donde se debe, conducir como se debe, bajar y subir por donde se debe, a sentarnos en el autobús o ir apretados pero nunca colgando en la puerta, al silencio, a los parques con los columpios (hamacas) puestos, a la basura en los basureros, a la radio maaaaaaala y sin humor, al acento de la tele, a cargar muchas moneditas en el bolsillo y reírnos solos pensando que rompimos el chanchito. Hemos aprendido a explicarle al carnicero cuál es el corte de carne que queremos para hacernos un buen asado. Se nos ha hecho un nudo en la garganta cuando por la tele escuchamos el himno antes del partido de la selección. Hemos sido hormiguitas ahorradoras para poder volver de vacaciones a casa.
Nosotros no somos millonarios porque ganemos en dólares, euros o libras, no somos extranjeros porque tengamos doble nacionalidad, no somos sudacas, ni latinos. Somos un montón de gente que se la ha jugado… y puso lo que tenía que poner, tanto como en nuestro propio país, pero con las oportunidades que allí no nos jugaban a favor. Nosotros somos testigos del cambio, porque para poder ver la totalidad de las cosas, hay que tomar distancia. Somos unos nostálgicos permanentes que añoramos el lugar donde nacimos y crecimos, pero el de antes de irnos… no el de ahora y que ya no reconocemos.
Nosotros somos esos con amigos en todo el mundo, que siempre tenemos visita en casa, que enviamos cosas y pedimos encargos, esos mismos que sufrimos paranoias nocturnas preguntándonos si nuestros seres queridos están en casa sanos y salvos y que aunque estemos pasando un mal momento siempre le decimos a nuestras madres que “estamos bien”.
Nosotros somos los que hacemos reír a nuestros nuevos amigos, los que les decimos que tienen que conocer el mejor país del mundo… pero que por favor, no vayan solos y tengan mucho cuidado."
 
Anónimo - alguno de los muchos otros que un día decidieron probar suerte lejos de casa.

jueves, 2 de octubre de 2014

Au pair Disco Boat Cruise

El fin de semana pasado estuvo el Au pair Disco Boat Cruise en Boston. Así que el sábado tenía que estar a las 5 pm en Boston ya que 5.30 partía el bote. La entrada costaba 20 dólares. La verdad que no me imaginaba un crucero pero tampoco un bote como ese jaja. Era bastante feo y en un principio estábamos todos amontonados y ni siquiera con un poco de música.
 
Después de ver eso, agradecí tener 21 ya que mi LCC me había dicho que había un sector especial para mayores porque era donde vendían alcohol. Cuando entré me pusieron la pulsera de +21 pero la verdad que el sector de especial no tenía nada. Una barra con snacks y bebidas, alguna que otra mesa con sillas y la pulsera no sé para qué porque podía pasar cualquiera.

Obviamente, siendo un bote para au pairs, 9 de cada 10 personas eran mujeres. Me encontré dos argentinos au pairs en el bote, ambos de Buenos Aires. Es raro encontrar argentinos au pairs acá y más siendo hombres.
 
Después de un rato abrieron otro sector en el piso de abajo y se pudo respirar y, al fin, escuchar un poco de música y bailar. Estuvo divertido, pasaron canciones en todos los idiomas.
 
No lo volvería a hacer pero la verdad que la pasé muy bien finalmente y está bueno porque pude volver a ver gente que no veía desde el TS. Es algo para hacer una vez y ya.

 
 
 
El bote termina a las 9 PM así que da tiempo para después ir a algún boliche o barcito. En mi caso fui a un pub Irlandés muy bueno, arriba de Quincy Market. Buena música, buena gente.. lugar copado.